En la era de la digitalización, el sector agrícola no se queda atrás. El cuaderno digital agrícola se ha convertido en una herramienta cada vez más utilizada por los agricultores, ofreciendo una serie de ventajas y desventajas que es importante considerar, especialmente para aquellos que trabajan en el norte de Extremadura, una región con una rica tradición agrícola, pero aun poco digitalizada en entornos muy anclados a la tradición.
Pros del cuaderno digital agrícola
Facilidad de registro: el cuaderno digital permite a los agricultores llevar un registro más sencillo y organizado de sus actividades agrícolas. Esto incluye la siembra, tratamientos fitosanitarios, cosechas y otros eventos relevantes, lo que facilita la gestión de la explotación. El acceso a Información en tiempo real; los agricultores pueden acceder a datos y estadísticas al momento, lo que les permite tomar decisiones contrastadas sobre el manejo de sus cultivos. Esto es especialmente útil en un entorno cambiante como el agrícola, donde las condiciones climáticas pueden afectar rápidamente las decisiones.
Por otro lado, el cumplimiento normativo: con la creciente regulación en el sector agrícola, el cuaderno digital va ayudar a los agricultores a cumplir con las normativas de trazabilidad y seguridad alimentaria. Esto es crucial para evitar sanciones y garantizar la calidad de los productos. Además, implica ahorro de tiempo y recursos dado que la digitalización de registros reduce el tiempo que los agricultores dedican a la burocracia y al papeleo. Esto les permite concentrarse más en las labores del campo y optimizar el uso de recursos. Finalmente, el análisis de datos. Los cuadernos digitales permiten realizar análisis de parámetros que pueden ayudar a los agricultores a identificar patrones y tendencias en sus cultivos, mejorando así la planificación y la productividad.
Las contras del cuaderno digital agrícola
Evidentemente, los costos Iniciales: La implementación de un cuaderno digital puede requerir una inversión inicial en tecnología, como dispositivos móviles o ordenadores personales, así como en “software” específico. Esto puede ser un obstáculo para algunos agricultores, especialmente aquellos con recursos limitados. A esto hay que sumar el aprendizaje. Para muchos agricultores, especialmente los de mayor edad, la transición a un sistema digital puede ser desafiante y compleja. La falta de habilidades tecnológicas puede dificultar la adopción del cuaderno digital. Sin olvidar la dependencia de la tecnología, puesto que las actualizaciones de los programas a utilizar están ligados a evoluciones muy frecuentes que también suponen una puesta al día para su uso. Requiere un tiempo adicional más allá el campo, que es a lo que lo-s agricultores destinan más de 8 y 10 horas diarias durante todos los días de la semana.