Tras los éxitos cosechados de manera consecutiva en Madrid, Granada y Catalunya, los casareños Paco Montes y David Collado se presentaban este fin de semana en tierras cordobesas, en el XI Rallye Ciudad de Pozoblanco, con la firme intención de hacerse con el campeonato de la Copa Kobe Motor. Para ello, la dupla del Extremadura Rallye Team llegaban con 155,80 puntos, 50 de ventaja sobre los segundos, por lo que eran claros favoritos para la victoria final, ya que se habían mostrado imbatibles con su Toyota Aygo N3 desde que se reanudó el campeonato a mediados de septiembre. Un campeonato a la que han regresado esta temporada tras un paréntesis de seis años.

La prueba cordobesa, con la que también se ponía punto y final al S-CER (Supercampeonato de España de Rallyes) y al CERT (Copa de España de Rallyes de Tierra), así como a la novena edición de la Copa Kobe Motor, un nuevo éxito estaba esperando para el automovilismo extremeño. Y llegó lo que se esperaba, cuando Paco Montes y su copiloto David Collado sellaron una nueva victoria en la jornada del sábado, certificando así su cuarto triunfo consecutivo en una prueba que controlaron de principio a fin, marcando un tiempo de 01:14:36,5 horas en completar los 98,38 km cronometrados repartidos en siete tramos de competición. Una victoria que además les reportaba la tercera plaza en la categoría N3.

Los extremeños comenzaron marcando el mejor tiempo en el primer tramo, aunque en el segundo bajaban a la segunda plaza de la general, pero que volvían a recuperar en el tercero con más de 20 segundos de ventaja. Posteriormente, la dupla no bajo el pistón, haciéndose de forma consecutiva con el mejor paso por el resto de los tramos cronometrados hasta conseguir una renta superior al minuto sobre sus más inmediatos perseguidores.

Según Paco Montes: “Al final hemos conseguido ganar la copa, ha sido un año muy intenso donde hemos ido al máximo, algo que teníamos en mente, porque ya teníamos experiencia en esta competición, donde habíamos quedado segundos y queríamos sacarnos la espina, como así ha sido finalmente”. Para finalizar, agradeciendo el apoyo a la Fundación Jóvenes y Deportes y a la Junta de Extremadura, así como también a los mecánicos y a la familia, “porque sin ellos esto sería imposible.”

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